En Cañete. DELINCUENTES CONTINÚAN SENTÁNDOSE EN LAS AUTORIDADES…
CALLE: GRAU Y SEPULVEDA LUGAR DONDE SE PRODUJO EL ASALTO DEL CAMBISTA |
Asalto a Cambistas y Bodegas se está haciendo costumbre en la otrora tranquila ciudad de San Vicente
Una vez más se puso en evidencia que la Seguridad Ciudadana en Cañete está por los suelos. Héctor Hernández, conocido cambista de la zona se convirtió en la última víctima de la delincuencia organizada en la Cuna y Capital del Arte Negro. Tres desconocidos que descendieron de un Geely plomo redujeron con sus armas de fuego al negociante de moneda extranjera, obligándolo a entregar todo el dinero con el que trabajaba. El hecho se registro al promediar la 1.15pm entre los jirones Grau y Sepúlveda a pocos metros de de la Plaza de Armas.
Los delincuentes a quienes no les preocupó estar en pleno centro de la ciudad y muy cerca de la sede del Ministerio Publico, con el botín en mano emprendieron la fuga para minutos mas tarde dejar abandonado el vehículo en el frontis del Jurado Electoral Especial de Cañete ubicado en el Jr. Jorge Chávez.
VEHÍCULO UTILIZADO POR LOS DELINCUENTES ABANDONADO EN LA PUERTA DEL JURADO ELECTORAL ESPECIAL DE CAÑETE |
Este hecho preocupo a los vecinos que a diario transitan por las calles san vicentinas. Lamentaron que Cañete se esté convirtiendo en una provincia insegura en donde los malhechores tienen el control de la jurisdicción y no la Policía Nacional del Perú. “Está demostrado que los delincuentes se sientan en la cabeza de nuestras autoridades”.
Transcendió que la poca confianza que hoy generan los efectivos del orden, habría desalentado al afectado del asalto a denunciar lo sucedido y el monto perdido.
Transcendió que la poca confianza que hoy generan los efectivos del orden, habría desalentado al afectado del asalto a denunciar lo sucedido y el monto perdido.
IMPORTANTE: Días antes, los propietarios de la conocida Bodega Sueng, ubicada en la calle Dos de Mayo a media cuadra de la Plaza de Armas, también fueron sorprendidos por los delincuentes, quienes con arma de fuego los obligaron entregar el dinero producto de la ventas del día, además de llevarse dos laptops y algunos productos de la tienda.